La corte de assises de Seine-Saint-Denis condenó este viernes 31 de octubre a Yann S. a 18 años de prisión por haber inmolado a su compañera Johanna P. en octubre de 2022 en Stains.
La víctima, de 26 años, murió el 2 de noviembre tras sufrir quemaduras en el 40 % de su cuerpo, principalmente en el rostro, brazos, tórax y piernas. El incendio fue descubierto cerca de las 21 horas por un policía retirado tras oír una detonación y encontrar el vehículo en llamas y a la mujer gravemente herida junto al coche.
El acusado, de 27 años, nunca reconoció el acto. Durante el juicio alegó que se trató de un accidente y que la víctima intentó suicidarse, habiéndose rociado con gasolina antes de prender fuego aparentemente para provocarlo. Sostuvo que él sólo usó un mechero y no sabe cómo comenzó el incendio exactamente.
Sin embargo, el tribunal rechazó los argumentos del suicidio y estimó que las pruebas apuntan al homicidio voluntario. El presidente explicó que “los argumentos ligados al suicidio no son recibibles”.
El fiscal pidió 26 años, pero la corte redujo la pena a 18 años, tomando en cuenta según el juez “el inicio de introspección” y cambios de actitud del acusado tras el suceso.
La defensa anunció que podría apelar y calificó el veredicto como “muy decepcionante”, apuntando a inconsistencias en las experticias para probar culpabilidad.
“Humanamente se entiende si pensamos que es culpable, pero la idea misma de la culpabilidad plantea dificultades” dijo el abogado Talia Coquis.
Por su parte, la abogada de la familia de Johanna expresó alivio por la condena, aunque lamenta que “18 años para una vida, siempre deja amargo”.
El proceso estuvo marcado por un debate intenso desde su inicio el martes, centrado en el supuesto suicidio de la joven y la responsabilidad real del imputado.
Este fallo sienta un precedente fuerte en la región para casos de violencia extrema contra mujeres, confirmando la gravedad de la condena en un contexto de creciente conciencia social sobre el tema.

































