Israel concluyó la primera fase de su retirada parcial de la franja de Gaza al entrar en vigor un alto el fuego que pone fin a más de dos años de conflicto con Hamas.
Las Fuerzas de Defensa Israelíes (Tsahal) anunciaron que desde el mediodía se reposicionaron en nuevas líneas acordadas, incluyendo la zona de la ciudad de Rafah, centro clave en el acuerdo firmado en Sharm el-Sheij, Egipto. Israel mantiene control ahora sobre el 53 % de Gaza, según un portavoz del primer ministro Benjamin Netanyahu.
Este movimiento marca el inicio de un conteo regresivo de 72 horas para la liberación de todos los rehenes — vivos y fallecidos — retenidos por Hamas, confirmó el ejército en X (antiguo Twitter). “Las tropas del Comando Sur siguen desplegadas para neutralizar amenazas inmediatas”, señaló el general de brigada Effie Defrin, portavoz militar.
En paralelo, el gabinete israelí aprobó la primera etapa del alto el fuego, con Netanyahu destacando que el objetivo principal es traer de regreso a todos los rehenes. En su mensaje remarcó el papel clave del expresidente estadounidense Donald Trump y su equipo — incluyendo al enviado especial Steve Witkoff y Jared Kushner — en facilitar el acuerdo.
“Estamos a punto de alcanzar nuestro principal objetivo: el retorno de todos los otages, vivos y muertos”, dijo Netanyahu durante el consejo de ministros.
El pacto prevé también la liberación por parte de Israel de más de 2,000 presos palestinos, incluidos 250 con condenas de prisión perpetua, a cambio de los rehenes. Trump confirmó el 8 de octubre en su cuenta en Truth Social que ambas partes validaron la primera fase del plan de paz y anunció que viajará la próxima semana al Medio Oriente para hablar ante la Knesset, un hecho sin precedentes para un expresidente estadounidense desde George W. Bush.
En el cruce fronterizo de Kerem Shalom, soldados israelíes supervisan la entrega y recogida de ayuda humanitaria, un aspecto crítico para la población de Gaza tras la crisis humanitaria.
Con el alto el fuego efectivo, la comunidad internacional espera que la etapa de negociaciones y liberación de prisioneros avance sin interrupciones, aunque la tensión sigue latente en la región.
