Las protestas convocadas por el movimiento GenZ212 siguen creciendo en varias ciudades de Marruecos, impulsadas por la frustración de la juventud contra el gobierno de Aziz Akhannouch.
Nacido de un inicio pacífico, el movimiento GenZ212 ha virado rápidamente hacia la reivindicación enérgica de “justicia social” y la lucha contra la corrupción, denunciando además la crisis profunda en la educación y la sanidad pública.
Esta generación, criada con internet y redes sociales, se comunica con un lenguaje directo y viral que choca frontalmente con la respuesta del gobierno, que se mantiene anclado en discursos formalistas y desconectados de la realidad digital que moviliza a los jóvenes.
Las manifestaciones evidencian un abismo entre las demandas urgentes de la juventud marroquí y la gestión política tradicional de un Ejecutivo acusado de falta de reacción y de ignorar el pulso social.
Los organizadores, expertos en redes sociales, lograron viralizar sus reclamos alcanzando repercusión nacional en un tiempo récord, poniendo al descubierto una crisis de representación y confianza hacia el liderazgo actual.
El fotógrafo Abu Adem Muhammed documenta las movilizaciones a nivel nacional, donde siguen activas y con alta participación ante la ausencia de respuestas contundentes desde Rabat.
Mientras el gobierno repite declaraciones oficiales sin propuestas concretas, la movilización juvenil amenaza con prolongarse y endurecerse en los próximos días, en un Marruecos donde la Generación Z quiere hacerse oír sin intermediarios.
