La 17ª edición de la Route du Café partió desde Le Havre con destino a Fort-de-France en medio de condiciones meteorológicas difíciles que ya obligaron a una categoría a zarpar antes de lo previsto. Cientos de miles de personas se acercaron al puerto para despedir y animar a los navegantes, desafiando ráfagas fuertes y lluvias ocasionales.
Entre la multitud, un bungalow de exhibición atrajo mucha atención alrededor del bassin Paul-Vatine, donde productores locales ofrecían especialidades caribeñas como punch, accras y licores tropicales. La música y la presencia de la futura Miss France 2025, orgullosa de mostrar su isla, le dieron un ambiente festivo pese al temporal.
Desde Cherburgo, Thierry confesó su entusiasmo no solo por la regata sino por apoyar a otro local destacado: Louis Duc, el navegante normando que se hizo famoso tras completar el Vendée Globe en febrero pasado. Varios niños llevaban orgullosos autógrafos suyos, entre ellos Elsa, joven regatista de Caen emocionada por conocer a Duc.
«No soy un modelo de regatista sino un hombre que luchó por cumplir su sueño. Quiero transmitir ese mensaje a los niños»,
dijo con su habitual modestia el patrón de 40 años, que recientemente puso a flote su imponente IMOCA Fives Group-Lantana en Caen.
Mientras los principales competidores esperan la orden de salida definitiva, la primera categoría ya puso rumbo a ultramar. El evento, clave para la navegación de altura francesa, sigue generando interés masivo pese a los vientos contrariados.
La Route du Café une las costas francesas con Martinica, demostrando que la pasión por el mar no se detiene ni ante el mal tiempo. El seguimiento y los resultados se esperan en próximos días con atención en toda la región Normandía y el público aficionado de Francia.

































