La comuna de Lessay, en la Manche, enfrenta desde hace años un problema creciente: sus trabajadores temporales tienen dificultades para encontrar alojamiento cerca de sus puestos de trabajo. Para responder a esta situación, el ayuntamiento acaba de lanzar un proyecto experimental con la instalación de cinco viviendas modulares en el Village des Pins.
Este barrio, construido en 1987 y ubicado en la rue de l’Hippodrome, ha alojado desde 2020 a trabajadores gracias a una decena de gîtes adaptados. Pero esas construcciones requieren renovaciones costosas, como aislamiento, desamiantado y mejoras energéticas. Ante las restricciones del Plan local d’urbanización que impiden expansión urbana, y con el objetivo nacional de cero artificialización neta para 2050, el municipio optó por aprovechar un espacio libre que quedó tras la tormenta Ciaran para una iniciativa innovadora.
Stéphanie Maubé, alcaldesa de Lessay, explicó que los cinco módulos habitacionales estarán listos este invierno. Cada uno tendrá 19,5 m2, con capacidad para una o dos personas, y serán de madera para integrarse al paisaje. Estarán dispuestos en forma de margarita alrededor de un acceso común. Además, el entorno ha sido preparado con una haie plantada el pasado primavera.
El Village des Pins está estratégicamente ubicado: a 200 metros de la zona artesanal Fernand-Finel y a diez minutos de la zona de actividad de Gaslonde, con acceso directo a vías verdes, carriles bici y paradas de autobús. Esto favorecerá la conectividad de los trabajadores con sus empleos y centros de estudio.
El proyecto también probará diferentes modos de gestión. Dos módulos serán gestionados junto al Foyer des Jeunes Travailleurs de Coutances, ofreciendo a los residentes apoyo personalizado para facilitar su inserción profesional y su independencia financiera. Dos módulos serán alquilados a empresas locales para facilitar la contratación, mientras que el último quedará bajo la gestión directa del ayuntamiento para evaluar y ajustar el programa si es necesario.
Las necesidades de alojamiento vienen de sectores variados: turismo estacional, agricultura (maraîchage, ostricultura), agroindustria y formación profesional, con contratos de entre dos y seis meses o alternancia entre trabajo y estudio. La iniciativa responde a la demanda creciente y busca evitar que estos trabajadores tengan que desplazarse lejos o recurrir a alojamientos informales o costosos.
Con esta medida, Lessay busca ser pionera en soluciones habitacionales modulares que podrían reproducirse en otras zonas rurales francesas con dinámicas similares. El proyecto no solo cubre una urgencia social, sino que también respeta los límites urbanísticos y ambientales del territorio.


































