Este sábado 11 de octubre, integrantes de la asociación L214 se movilizaron en la Place de la Comédie en Montpellier para alertar a los ciudadanos sobre el gran impacto de la carne que consumen. Vestidos de naranja, instalaron un contador humano que reflejaba la cantidad de animales sacrificados para alimentación en la metrópoli durante los últimos cinco años: 112 millones. Cada 30 segundos, el número aumentaba en 20, un llamado visual para que los transeúntes midieran el costo real de su consumo diario.
Esta acción en Montpellier fue parte de una campaña nacional simultánea en más de 30 ciudades francesas, bajo el lema “Le grand sauvetage du siècle”. El objetivo es reducir en un 50% el sacrificio de animales para consumo humano antes del año 2030. Según L214, en Francia se sacrifican anualmente 1,2 mil millones de animales terrestres y 7 mil millones de animales acuáticos para fines alimentarios.
La asociación espera que la municipalidad de Montpellier firme la “charte du Sauvetage du siècle”, la cual incluye medidas concretas como reducir la carne en comedores escolares, ofrecer menús vegetarianos y veganos periódicos, y excluir productos de animales criados sin acceso al aire libre.
Montpellier fue reconocida en 2024 como la cuarta ciudad más comprometida con el bienestar animal, pero L214 sostiene que falta avanzar en políticas oficiales y concretas. “Queremos que la ciudad tome un rol activo para salvar millones de vidas cada año”, señalaron miembros de la organización.
El contador humano y la campaña buscan mantener la presión pública y que las autoridades adopten un enfoque responsable hacia el consumo sostenible y ético en la región. Mientras tanto, miles de paseantes quedaron frente a un dato difícil de ignorar: millones de animales desaparecen cada día para la alimentación en Francia.
