Marruecos y China avanzan hacia una alianza estratégica basada en historia, poder y grandes inversiones. Esta semana en Pekín, el ministro marroquí de Exteriores, Nasser Bourita, inició un diálogo decisivo con su homólogo chino, Wang Yi, que marca un salto en la cooperación bilateral.
La visita ocurre bajo un contexto geopolítico tenso, con Marruecos y China escalando su relación justo después de que el presidente Xi Jinping regresara del cumbre de los BRICS en Brasil. En noviembre pasado, Xi fue recibido en Casablanca por el príncipe heredero Moulay El Hassan, un gesto simbólico que reflejó la profunda alianza entre ambos países.
La cooperación no es solo política. Marruecos apuesta fuerte en sectores estratégicos que incluyen baterías para vehículos eléctricos, trenes de alta velocidad (TGV) y producción de hidrógeno verde. Los proyectos suman miles de millones de dólares y pretenden posicionar al reino en la vanguardia tecnológica y energética en África y el Mediterráneo.
Detrás de esta cooperación está también una sutil batalla diplomática sobre el Sahara Occidental. La creciente alianza con China ofrece a Marruecos un aliado influyente en foros multilaterales clave, incluida la ONU, donde disputa la soberanía del territorio.
Bourita y Wang Yi pactaron mantener una “asociación estratégica integral” con reuniones regulares de seguimiento para acelerar inversiones y cooperación tecnológica. Marruecos busca explotar plenamente el apoyo chino para consolidar proyectos que puedan transformar su economía y reforzar su posición geopolítica.
El vuelo de la bilateralidad no está exento de retos. La competencia global por la influencia en África entre China, Europa y Estados Unidos complicará el avance. Pero por ahora, el vínculo marroquí-chino da un paso firme con impacto económico inmediato y una firme apuesta política.
La foto del encuentro entre Moulay El Hassan y Xi Jinping en Casablanca este año simboliza más que diplomacia: significa una relación donde historia, recursos y poder se entrelazan con proyectos millonarios.
