El Basket Club Chauray encajó otra derrota dolorosa este sábado 8 de noviembre frente a Dijon, 38-55, y complica aún más su temporada en Nationale 1, sin haber ganado un solo partido.
El golpe fue doble para las chauraisiennes nada más comenzar el encuentro. Su jugadora clave Maelys Caloux sufrió una lesión grave en el tobillo que la dejó fuera del juego, un duro golpe para un equipo que ya navega en aguas turbulentas.
En la cancha, Chauray empezó bien, superando a Dijon en los primeros cinco minutos, pero rápidamente se desmoronó. El primer cuarto terminó con un marcador débil de 4-10 y el resto del juego se desarrolló bajo la dominancia de las visitantes.
En el segundo acto, ambos equipos mostraron fallos, pero Dijon encontró eficacia especialmente gracias a Perro, quien manejó el juego con maestría. Al descanso, el parcial reflejaba un preocupante 15-23 para las locales.
El tercer cuarto fue crítico. Las jugadoras de Chauray se mostraron frustradas y nerviosas mientras las franc-comtoises aumentaron la distancia, hasta +16 (25-41) con tiros de tres que castigaron duramente.
En el último cuarto, la capitana Fatou Dieng, siempre combativa y llena de energía, intentó liderar la remontada, pero sus esfuerzos no bastaron. El marcador final fue un claro 38-55, consolidando la séptima derrota consecutiva de las locales.
“Muchísima tristeza esta noche por dos razones, la lesión de Maelys y otra derrota más. No logramos encajar, esto tiene que cambiar rápido,” dijo Fatou Dieng a pie de cancha.
El ambiente en Chauray fue sombrío, con lágrimas y decepción predominando. A pesar de la adversidad, Dieng pidió unidad y reacción inmediata para enderezar el rumbo.
Con esta mala racha, el Basket Club Chauray pone en jaque su temporada y se enfrenta ahora a la urgente tarea de revertir la tendencia para evitar caer aún más en la tabla de la N1.


































