Un nuevo servicio público digital facilita la recuperación de vehículos retirados y llevados a la fourrière en Francia.
Antes, los dueños de coches debían desplazarse al comisariado para obtener una autorización llamada “main levée” antes de ir a la fourrière a retirar el vehículo. Ahora esta gestión es mucho más rápida y sencilla gracias a una plataforma en línea disponible en service-public.fr y a través de FranceConnect.
Jean-Baptiste Le Dall, abogado especializado en derecho automotor, explica que para usar el servicio solo hace falta ingresar el número de matrícula y el número de fórmula de la carte grise (11 caracteres). Esto permite confirmar si el coche está realmente en la fourrière y descargar la “main levée” en formato digital, sin necesidad de pasar por el comisariado ni la gendarmería.
Este cambio puede ahorrar tiempo y dinero, ya que la custodia en la fourrière genera un coste diario aproximado de 30 euros. El plazo legal para retirar el vehículo es de 15 días, pero puede reducirse a 10 días para coches mayores de 12 años. Pasado ese tiempo, la administración entiende que el propietario abandona el vehículo y puede proceder a su venta pública.
El proceso clásico, una cadena de gestiones presenciales y visitas sucesivas, provocaba largas esperas y costos adicionales para los conductores que sufrían un despiste o multa.
Con esta novedad digital, Francia da un paso más hacia la simplificación administrativa en el terreno del tráfico y la recuperación de vehículos, aliviando una de las peores experiencias para los automovilistas.
