Florian, el policía acusado por el asesinato de Nahel Merzouk en junio de 2023, habló por primera vez desde que fue liberado bajo control judicial tras cinco meses en prisión preventiva. El joven de 16 años murió tras un control policial en Nanterre, hecho que desató una ola de disturbios en toda Francia.
El caso sigue en espera: la apelación de Florian, cuyo juicio por homicidio voluntario fue programado ante la corte de asuntos criminales, se pospuso para el 4 de diciembre. Mientras tanto, el ex agente se mantiene firme. En entrevista con Actu Police, relató sus experiencias en prisión: “Empecé a no soportar el ruido de los demás detenidos, el aislamiento era fuerte, hablaba conmigo mismo y daba vueltas” pero añadió que logró mantenerse “fuerte” apoyándose en el deporte y la lectura.
Tras salir en noviembre de 2023, Florian señaló estar bajo seguimiento psiquiátrico y tratamiento por “trastornos depresivos”. Actualmente trabaja en otra jurisdicción, donde asegura sentirse apoyado, aunque se mostró “preocupado por mis seres cercanos” debido a las amenazas de muerte que ha recibido.
Reconoció que su vida profesional cambió radicalmente: “No hago el mismo trabajo, pero hago lo mejor y siempre encuentro alguien que me guía”. Además, agradeció a los franceses que le han enviado mensajes de apoyo tanto durante su encarcelamiento como después, especialmente en redes sociales.
“Me presentaré ante la corte determinado a defender mi posición, como desde el inicio, no es fácil todos los días, pero sigo combativo”
Este testimonio vuelve a poner en primer plano la tensión alrededor del caso que marcó a Francia en 2023, con manifestaciones y debates sobre el uso de la fuerza policial. La apelación se vuelve así un punto clave en un proceso que continuará polarizando.


































