El propietario del Haras du Haut-le-Vent en Adainville (Yvelines) niega las acusaciones de haber realizado construcciones ilegales dentro del bosque de Rambouillet, un caso que llegará a juicio el próximo 12 de mayo de 2026 en el tribunal de Versailles.
Varias asociaciones locales, entre ellas Jade, Sauvons les Yvelines y el Colectivo para Adainville, acusan al haras de ampliar sus instalaciones durante 25 años en terrenos protegidos, lo que el dueño y su abogado califican de “completamente lunático” y “una operación calumniosa”.
El abogado, además hermano del propietario, reclamó que la convocatoria judicial fue conocida por su cliente solo a través de la prensa el 8 de octubre de 2025, lo que añade más tensión al proceso. Según el representante legal, hay un “problema de catastro” y el terreno en disputa no pertenecía oficialmente al bosque según documentos oficiales.
“La parcela en cuestión no forma parte del bosque de Rambouillet”,
declaró el abogado, asegurando que el cambio de zonificación fue aplicado sin informar al propietario tras la compra en 2011.
El cambio del antiguo Plan de Ocupación de Suelos a la nueva clasificación convirtió lo que era un prado en “llanura forestal” de un día para otro, sin notificación formal. La defensa critica la falta de diligencia del ayuntamiento y anuncia que solicitarán una corrección del error de zonificación.
Además, el dueño destaca que entre las obras figura la construcción de una pista ecuestre subvencionada y destinada a niños con discapacidad. También menciona que los boxes ya estaban al momento de la compra y que constantemente replantan árboles.
El equipo legal reclama que no han recibido respuesta desde junio de 2025 ni por parte de la prefectura ni de la Dirección Departamental de Territorios, a pesar de intentos por resolver el asunto de forma amistosa.
Este caso expone un conflicto que mezcla cambios administrativos con denuncias de protección del bosque, y que podría sentar un precedente en la protección ambiental versus derechos adquiridos en zonas rurales de Yvelines. La audiencia será clave para definir la legalidad de las obras y la situación real de los terrenos.
