El Gran Premio de Singapur 2025 dejó una carrera impecable para George Russell, quien se llevó la victoria con una actuación perfecta que consolida su prestigio y pone presión a las demás escuderías en la lucha por el Mundial de Fórmula 1. La cita nocturna en Marina Bay sostuvo la intensidad habitual, pero el británico de Mercedes sobresalió con un fin de semana sin errores, una actuación que su jefe de equipo, Toto Wolff, seguramente querrá recompensar con un contrato extendido.
Russell se impone con autoridad y Mercedes refuerza su poderío
George Russell recibió una calificación de 10 por parte del veterano periodista Leo Turrini, quien destacó su dominio total y control de la carrera, desde la salida hasta la bandera a cuadros. A lo largo de las 61 vueltas en el trazado urbano de Singapur, Russell gestionó con maestría sus neumáticos y ritmo, evitando errores en un circuito técnico y exigente.
Su compañero de equipo, Antonio Antonelli, consiguió un meritorio quinto lugar, logrando un adelantamiento crucial sobre Charles Leclerc de Ferrari, aunque sufrió incidentes en la partida que complicaron su carrera. Antonelli recibió un 7, reflejo de su sólido desempeño pese a no tener la brillantez del líder del equipo.
McLaren celebra el título de constructores mientras sus pilotos chocan
Una de las notas importantes tras el GP fue la confirmación del décimo título mundial de constructores para McLaren, una marca histórica para el automovilismo que no ganaba desde hace décadas. Sin embargo, la felicidad del equipo papaya se matizó por las tensiones entre sus dos pilotos jóvenes. Lando Norris y Oscar Piastri protagonizaron un fuerte contacto en la salida que generó polémica y tuvo repercusiones en su ritmo por el resto de la carrera.
Norris, calificado con un 6,5, destacó por su agresividad inicial, pero prefirió no arriesgar contra Max Verstappen y terminó detrás del neerlandés, quien fue segundo con una nota alta de 8,5. Por su parte, Piastri recibió un 6, y fue criticado por su actitud que algunos consideraron “llorona” tras el choque con su compañero. Estas tensiones podrían afectar la dinámica interna en McLaren en el tramo final del año.
Verstappen no gana pero sigue firme en la pelea por el Mundial
El bicampeón mundial y líder del campeonato Max Verstappen no pudo imponerse en Singapur, lugar donde había planeado cerrar el año marcando territorio. Terminó segundo, escoltando a Russell y manteniendo la presión en el torneo. Su evaluación 8,5 refleja un rendimiento sólido, pese a que su mente está puesta en el título, que aún se define a seis carreras del final.
Ferrari en crisis: Leclerc y Hamilton decepcionan
Ferrari, el equipo italiano con más historia, vivió un GP para olvidar. Charles Leclerc y Lewis Hamilton, que a esta altura corre para Ferrari, sufrieron problemas de ritmo y confiabilidad. Hamilton tuvo problemas en los frenos hacia el final y fue calificado apenas con un 5,5. La situación de Leclerc, con idéntica nota, refleja un piloto atrapado en “depresión” según Turrini, incapaz de recuperar la confianza en esta temporada negativa para la Scuderia.
Sainz brilla en casa ajena y Williams recoge puntos valiosos
Una de las sorpresas positivas la firmó Carlos Sainz, piloto español que corre para Williams. Partiendo casi desde el final de la parrilla, Sainz remontó de manera espectacular para sumar puntos en Singapur, su “hogar espiritual” por la cercanía cultural y cariños de su público italiano y español. Su 9 destacado confirma la actuación de un piloto experimentado capaz de exprimir al máximo un monoplaza que no suele estar entre los favoritos.
En contraste, su compañero Alex Albon padeció la difícil situación de salir desde el fondo y recibió una nota baja (5) por la poca trascendencia en su desempeño.
Otras actuaciones y decepciones en Marina Bay
Yuki Tsunoda fue el gran fracaso para Red Bull, con una calificación 0 tras ser doblado otra vez por Verstappen. La mala suerte o falta de ritmo en la casa austriaca podrían llevarle a pensar en cambios para la próxima temporada. Por el contrario, Fernando Alonso aportó un valor casi humorístico al GP: su notable protagonismo a través de su radio con el equipo lo convirtió en el “payaso” oficial, ganándose una nota 10 en ese aspecto.
Alonso contrasta con su compañero Lance Stroll, que solo consiguió un 4, incapaz de disfrutar la carrera y envolverse en la lucha.
El español Pierre Gasly también vivió un día difícil con Alpine, calificándose a sí mismo como deseando terminar una “época horrible” para su escudería. Su compañero Colapinto logró una valoración decorosa de 6, mostrando potencial pese a las limitaciones técnicas.
Por último, en equipos como Sauber y Haas se vieron luces y sombras. Nico Hülkenberg entregó una actuación con errores que arruinaron parte de su carrera, mientras que Christian Bortoleto fue destacado aunque sin brillo. En Haas, Ocon se vio claramente superado por su joven compañero Bearman, quien lideró la escudería con 6,5 en una temporada complicada para el equipo.
Implicaciones para el campeonato y el futuro inmediato
Con solo seis carreras restantes, el Mundial 2025 se apretó aún más. Mercedes, con el impulso de Russell, parece recuperar terreno frente a Red Bull y Ferrari. McLaren celebra el título de constructores pero deberá resolver las disputas internas si quieren desafiar por victorias individuales. Mientras, Ferrari debe reagruparse para evitar que su crisis se extienda más allá de lo esperado.
La carrera en Singapur sirvió para definir jerarquías y revelar debilidades. La serenidad, el manejo del coche y la capacidad de evitar errores fueron cruciales. Singapur, con su circuito urbano y condiciones exigentes, volvió a demostrar que no solo la velocidad pura manda, sino la gestión total de la carrera.
Las próximas fechas marcarán tendencias claves, con Singapur ya en el retrovisor y la llegada del Gran Premio de Austin a mediados de octubre, donde nuevamente se preve un duelo apasionante por la corona mundial.
