British Airways ha estrenado dos nuevas salas VIP premium en Miami y Dubái, reforzando su presencia internacional fuera del Reino Unido.
La sala de Miami International Airport (MIA) es la mayor que BA opera fuera de Londres, con 13,000 pies cuadrados, ubicada justo sobre su puerta de embarque en la Terminal E. La apertura busca ofrecer máxima comodidad a los pasajeros antes de sus vuelos larguísimos hacia Londres. Esta instalación destaca por combinar la elegancia británica con elementos locales como la arquitectura Art Deco de Miami, cuenta con cinco zonas distintas y un menú que mezcla productos locales de temporada con un toque británico. Entre las bebidas, destaca el cóctel exclusivo “Prickly Margarita”. También ofrece una Concorde Dining Room para clientes de primera clase.
La sala en Dubai International Airport (DXB), aunque más pequeña con casi 5,800 pies cuadrados, incorpora un diseño inspirado en la arquitectura tradicional de los Emiratos Árabes Unidos, con menús que fusionan ingredientes árabes con la gastronomía británica. Está en la Terminal 1 y cuenta con barras completamente atendidas, opciones self-service y una exclusiva Concorde Dining Room. British Airways colaboró con el grupo Al Tayer Stocks para desarrollar este espacio.
“Estas salas son el siguiente paso en nuestro plan de transformación de lounges. Aquí hay opciones para relajarse, comer, trabajar o disfrutar de una copa en un entorno único”, explicó Calum Laming, Chief Customer Officer de British Airways.
Ambos aeropuertos son claves en la red de BA. En Dubai, la aerolínea opera tres vuelos diarios desde London Heathrow con A380, Boeing 777 y 787 Dreamliner. Miami está servido solo por el Airbus A380 de BA, con vuelos diarios que aumentarán a dos diarios a partir del 26 de octubre, durante el horario de invierno de IATA.
El Airbus A380 brinda hasta 469 asientos en cuatro clases, incluyendo 14 suites en primera clase, 97 camas en business class, 55 plazas en premium economy y 303 en economy. Esta inversión en infraestructuras premium destaca la apuesta estratégica de British Airways por fortalecer sus hubs internacionales más importantes fuera del Reino Unido.
