Un broche de diamantes único que perteneció a Napoleón Bonaparte será subastado en la prestigiosa venta Royal & Noble de Sotheby’s el 12 de noviembre en el hotel Mandarín Oriental en Ginebra. La pieza, valorada entre £150,000 y £210,000, desatará interés por su historia y rareza.
Este broche redondo, de unos 45 mm de diámetro, contiene un diamante oval central de más de 13 quilates, rodeado por casi 100 pequeños diamantes cortados en estilo antiguo, distribuidos en dos filas concéntricas. Fue creado en París hacia 1810 y diseñado para adornar el sombrero de dos picos de Napoleón, con un gancho para colgarse también como colgante.
Según Sotheby’s, la pieza fue confiscada por el ejército prusiano tras la derrota de Napoleón en la batalla de Waterloo. En la retirada caótica, el broche quedó atrás junto con varios carruajes atrapados en el barro. Después fue entregado como trofeo de guerra al rey prusiano Federico Guillermo III el 21 de junio de 1815.
La joya pasó a formar parte de la colección de la casa Hohenzollern, heredándose desde Federico Guillermo III hasta el káiser Guillermo II, y más tarde al príncipe Luis Fernando de Prusia (1907–1994). En los últimos años, permaneció en una colección privada.
Esta subasta es la primera vez que el broche sale al mercado abierto. Los expertos siguen con atención si alcanza el tope estimado, lo que lo convertiría en uno de los artefactos napoleónicos más valiosos vendidos en una sola pieza.
La historia, la procedencia y el peso simbólico de la joya – íntimamente ligada a Waterloo y el fin del Imperio Napoleónico – hacen de este objeto un activo codiciado, no solo en términos de joyería sino de patrimonio histórico.
































