La policía de Pljevalja arrestó a un entrenador deportivo identificado como M. G. por sospechas de acoso sexual a una menor de 14 años a su cargo.
El presidente del Consejo para los Derechos del Niño de Montenegro y ministro de Deporte y Juventud, Dragoslav Šćekić, condenó el caso públicamente, expresando “profunda preocupación e indignación”. Subrayó que es inadmisible que el sospechoso, persona de confianza para padres e instituciones, haya cometido estos actos en un entorno donde se espera seguridad para los niños.
“Llamamos a las autoridades a realizar una investigación rápida, exhaustiva e imparcial y a aplicar todas las medidas legales para proteger los intereses del menor”, declaró Šćekić.
El Ministerio acentuó que la protección contra todo tipo de violencia, incluido el abuso sexual, es una obligación estatal y social básica. Pidieron mejorar los mecanismos de prevención y control en sectores donde los niños interactúan con adultos, especialmente en el deporte, la educación y actividades recreativas.
El Consejo expresó también su apoyo total a la víctima y su familia, destacando la valentía de quienes denuncian la violencia y la necesidad de garantizarles seguridad y respeto.
El caso revive el debate en Montenegro sobre la supervisión de entrenadores y adultos responsables en entornos infantiles, tras una serie de denuncias similares en el país.
Por ahora, M. G. permanece bajo custodia mientras la investigación sigue abierta.


































