Dos traficantes de drogas fueron condenados esta semana en Reading Crown Court tras ser detenidos con una gran cantidad de cocaína en Newbury.
Aston James, de 19 años y residente en Craven Dene, Newbury, recibió una pena de dos años y medio. Por su parte, George Morgan, de 29 años, de Aldershot, fue condenado a tres años y nueve meses de prisión.
Ambos se declararon culpables en audiencia única: James por posesión con intención de vender cocaína; Morgan por posesión con intención de suministro tanto de cocaína como de cannabis.
La detención ocurrió el 17 de julio a las 15:25, cuando la policía acudió a un área boscosa en Highwood Copse, Newbury, tras recibir denuncias sobre actividad sospechosa. Al llegar, encontraron a los dos hombres junto a teléfonos móviles, dinero en efectivo y 10 bolsas de cocaína. James intentó desechar las drogas al ver a la policía.
Un vehículo vinculado a Morgan estaba estacionado cerca. Dentro los agentes descubrieron dos grandes bolsas con un total de 124 gramos de cocaína, valorados en alrededor de £12,400 en el mercado negro.
Los dos fueron arrestados ese mismo día y quedaron en custodia. Fueron formalmente imputados al día siguiente.
“Localizamos a James y Morgan con una cantidad sustancial de drogas. Hemos retirado estos estupefacientes de la cadena de suministro,” explicó el agente investigador PC Thomas Goold.
“Estos condenados recibirán penas significativas que reflejan la gravedad de su delito. La oferta de drogas daña especialmente a los más vulnerables,” añadió.
La policía del área, Thames Valley Police, pidió a la población que continúe enviando información sobre el tráfico de drogas en sus comunidades. Se puede denunciar de forma confidencial llamando al 101 o vía online. También está disponible la línea anónima de Crimestoppers (0800 555 111).
Este caso subraya la vigilancia policial contra el narcotráfico local y la cooperación ciudadana en la lucha contra drogas ilegales en el sur de Inglaterra.
