La International Hockey Federation (FIH) confirmó hoy que no tiene intención de modificar la regla que castiga el lanzamiento de equipo durante los corners penales, a pesar de las críticas recientes. La polémica se desató en un partido en Holanda, donde un jugador fue expulsado tras impactar con su stick en un árbitro.
El artículo 9.16 del reglamento de la FIH establece sanciones duras para cualquier jugador que arroje su equipo durante estas jugadas. Tras el incidente, se generaron varias voces que pedían suavizar la norma, considerados por algunos como demasiado estricta o desproporcionada.
Sin embargo, la federación británica y la FIH dejaron claro que primero escucharán el feedback de jugadores y entrenadores antes de pensar en alguna posible revisión. De momento, el castigo permanece y las autoridades insisten en cuidar la seguridad de los árbitros y el orden en el campo.
Este tipo de sanción es clave para evitar incidentes que pueden escalar en agresiones mayores, subrayan desde la FIH. El foco ahora está en canalizar las críticas y sugerencias para mejorar las reglas sin bajar la contundencia del reglamento actual.
El incidente holandés ha puesto el tema sobre la mesa en el hockey mundial y generó debate intenso en redes y medios deportivos en Reino Unido. Las federaciones locales observan con atención los movimientos internacionales, mientras el deporte británico mantiene firme su postura para proteger a los árbitros.


































