Shrewsbury Prison rindió homenaje a dos de sus oficiales más queridos, Graham Goodwin y Keith Wilcockson, nombrando dos salas en su honor tras sus décadas de servicio. La ceremonia tuvo lugar el mes pasado en la histórica prisión, que lleva años abierta al público en forma de atracción turística en Shropshire.
Tanto Goodwin como Wilcockson dedicaron más de 38 años al servicio penitenciario, con 25 años específicamente en HMP Shrewsbury. Después de retirarse, volvieron como guías turísticos, donde su conocimiento y carisma ayudaron a dar vida a la historia del lugar para miles de visitantes.
En un gesto simbólico, los dos retirados oficiales inauguraron las salas no con una cinta, sino desbloqueando un par de esposas, una imagen que representa su carrera y legado dentro y fuera de la prisión.
Graham Goodwin dijo: “Ser reconocido así es muy emotivo. Los oficiales de prisiones rara vez reciben reconocimiento, la mayor parte de nuestro trabajo pasa desapercibido.”
Keith Wilcockson añadió: “Nunca imaginé que el trabajo se volviera parte de mi vida. Esta prisión, aunque sea de ladrillos y barrotes, está construida con el sacrificio de su gente.”
El director ejecutivo de Cove Group, Joel Campbell, que gestiona la prisión como espacio de visitas, destacó la importancia de ambos para el proyecto:
“Graham y Keith son leyendas del servicio penitenciario y pilares fundamentales en la experiencia para visitantes desde que abrimos al público hace diez años.”
Ahora, al retirarse definitivamente, sus nombres quedan grabados en la historia de Shrewsbury Prison. La prisión continúa siendo un punto clave para la educación y el turismo cultural sobre la vida carcelaria en el Reino Unido.
