Lloyds Banking Group confirmó el cierre masivo de sucursales en todo Reino Unido, afectando a clientes de Lloyds Bank, Halifax y Bank of Scotland. La compañía no ha detallado aún las fechas exactas de las clausuras, dejando a millones de usuarios en la incertidumbre sobre cuándo perderán el acceso a sus oficinas locales.
Desde 2015, que se registró la ola inicial de cierres, más de 6.400 sucursales han cerrado, un promedio de 53 al mes, reporta la organización de defensa del consumidor Which?. Esta nueva ronda de cierres forma parte de una tendencia que refleja el cambio en los hábitos bancarios: más de 21 millones de clientes ya usan aplicaciones móviles para gestionar sus cuentas y operaciones.
Las sucursales afectadas en Lloyds Bank incluyen localidades como Alfreton, Birmingham, Chepstow, Deal, Fleet y Totnes. En el caso de Halifax, números como Buxton, Havant y Skipton están en la lista, mientras el Bank of Scotland cerrará puntos en Bellshill, Glasgow, Grangemouth y St Andrews.
La medida afecta especialmente a comunidades más pequeñas y zonas rurales, donde la accesibilidad a servicios bancarios podría complicarse. No obstante, el banco insiste en que está “proporcionando más opciones”, con acceso a sus servicios digitales, la red de sucursales y cajeros compartida, oficinas postales y depósitos en más de 30.000 puntos PayPoint repartidos por el país.
“La forma en que la gente banca ha cambiado, con más clientes que nunca gestionando su dinero a través de nuestras apps,” dijo un portavoz de Lloyds Banking Group.
El anuncio se produce en un contexto de transformación digital acelerada en la banca británica y creciente debate sobre el impacto en los usuarios más vulnerables, como personas mayores o con menor acceso a tecnología. Sin fecha para los cierres, la incertidumbre se extiende mientras los clientes intentan reorganizar sus operaciones bancarias.
