La ministra de Fe y Comunidades del Reino Unido, Miatta Fahnbulleh, avaló las críticas del exfutbolista inglés Gary Neville sobre la creciente división social en el país, que atribuyó a “hombres blancos enfadados de mediana edad”.
Esta declaración surge después de que Neville revelara en LinkedIn que retiró una bandera del Reino Unido de uno de sus desarrollos inmobiliarios en Manchester, argumentando que el símbolo estaba siendo usado de forma negativa y para sembrar divisiones. “Durante 15-20 años nadie había puesto una bandera ahí, ¿por qué ahora?”, se preguntó Neville.
La intervención de Neville llegó tras el ataque reciente en la sinagoga de Heaton Park en Crumpsall, Manchester, perpetrado por Jihad Al-Shamie. Aunque el agresor no encaja en la descripción del “hombre blanco enfadado”, la ministra señaló en ITV que la división “no está concentrada en un solo grupo”. Fahnbulleh advirtió que la fractura social se ve en múltiples comunidades, pero la mayoría de la gente sigue siendo “decente, tolerante y acogedora”.
“Estamos viendo un juego que ya hemos vivido, con personas intentando avivar tensiones y echar la culpa a otros”, dijo la ministra. “Este país lleva una década y media con el nivel de vida estancado, y eso desgasta mucho”.
Neville también criticó duramente el impacto político y social del Brexit, que, a su juicio, ha alimentado discursos de odio y división. “Debemos dejar de promover a quienes diseminan odio y abuso”, afirmó el exdefensor de Manchester United.
La conversación sobre la unión y el respeto se intensifica en un contexto de aumento en incidentes de odio y polarización en el Reino Unido, con el gobierno presionado para erradicar a quienes promueven la división entre comunidades.
