Nigeria y Sudáfrica están a un paso de salir de la lista gris del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) el próximo 24 de octubre, informó Bloomberg esta semana. La decisión, que se tomará en la plenaria final del GAFI en París, reconocería avances clave en la lucha contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo en estas dos economías africanas.
El GAFI, con sede en París y donde participan países como Estados Unidos, Reino Unido, China e India, puso a Nigeria y Sudáfrica bajo vigilancia reforzada en febrero de 2023 por deficiencias en sus sistemas financieros. Los últimos informes de los evaluadores tras visitas in situ destacan mejoras sustanciales en sus planes de acción. También Burkina Faso y Mozambique, otros dos países africanos en la lista, podrían salir simultáneamente.
Temitope Ajayi, portavoz del gobierno nigeriano, aseguró:
“Es la culminación del trabajo notable que hace el gobierno para cumplir obligaciones globales y atraer inversiones”.
Por su parte, funcionarios sudafricanos rechazaron comentar hasta que se publique la decisión oficial, pero en julio habían informado que se completaron los 22 puntos requeridos para la exclusión.
Analistas anticipan que esta salida mejorará la confianza de los inversores internacionales, aunque su impacto en los mercados sería modesto y temporal. Lauren van Biljon, gestora en AllspringGlobal Investments UK, dijo:
“Confirmaría que las reformas son reales y duraderas”.
La exclusión de la lista gris es clave para evitar restricciones y costos elevados de capital tras la caída de entradas financieras que, según un informe del FMI en 2021, sufren los países listados.
En Mozambique, el proceso de deslistado avanza tras completar las 26 medidas exigidas, según explicó Luís Abel Cezerilo, coordinador nacional, en un momento crucial para la reactivación del proyecto de gas natural de TotalEnergies, valorado en 20.000 millones de dólares.
Por su parte, Burkina Faso notificó que cumplió las 37 acciones requeridas, pero su gobierno no respondió a solicitudes de información.
Bajo la presidencia actual del GAFI, la mexicana Elisa de Anda Madrazo, el grupo ha endurecido la supervisión de países más desarrollados mientras flexibiliza a las naciones menos ricas, buscando un control más equilibrado del riesgo global.
Este movimiento de Nigeria y Sudáfrica representa un giro importante para sus sistemas financieros, cruciales no solo para la estabilidad regional sino también para facilitar inversiones desde el Reino Unido y Europa, que vigilan de cerca estas listas para evitar riesgos reputacionales.
