El proveedor británico de energía OVO anunció un cambio que encarece la carga de vehículos eléctricos (EV) a partir del 4 de noviembre. La tarifa “Charge Anytime”, que hasta ahora permitía cargar a un precio fijo de 7p por kWh en cualquier momento, subirá a 14p por kWh para los clientes que no se acojan a un nuevo plan mensual.
El nuevo esquema obliga a los usuarios a pagar desde £27.50 al mes para un paquete que incluye una estimación de 700 millas y un bono para cargar en estaciones públicas. Esto significa que para quien conduzca menos de 700 millas mensuales, la factura podría dispararse hasta más del doble, según denunciaron varios usuarios.
Chris Goddard, propietario de un EV, dijo a The Guardian:
“Es un insulto. Elegí un coche eléctrico también por las tarifas bajas de OVO, pero ahora me tocará pagar más del 100% extra”
Andrew Capstick, editor de utilities en MoneySavingExpert.com, alertó que las subidas ocurren en un momento crítico para los hogares británicos, con precios de energía ya elevados. “Charge Anytime era una de las pocas tarifas que ofrecían carga barata y flexible en casa a cualquier hora” señaló.
OVO defiende que su oferta representa una “forma fácil y flexible de pagar”, integrando en un solo pago la carga en casa y en público, y que retirará las penalizaciones para quienes quieran cancelar. También mantiene tarifas especiales para clientes vinculados con Volvo o las promociones de Volkswagen Group, que seguirán pagando 7p por kWh.
El golpe afecta a miles de hogares que usarían los vehículos eléctricos para ahorrarse costes y reducir emisiones en el Reino Unido. La subida puede frenar la adopción para quienes aún dudan sobre los costes reales del combustible eléctrico frente al diésel o gasolina.
Con la exigencia de adaptarse rápido o asumir un fuerte aumento, muchos usuarios deberán revisar su plan y presupuesto en plena crisis energética británica. La nueva estructura apunta a granjas urbanas y familias que no recorren grandes distancias pero serán las más perjudicadas.
