El director de la Policía de Montenegro, Lazar Šćepanović, pidió a la ciudadanía evitar tomar la justicia por mano propia tras un violento ataque ocurrido hace días en Podgorica. El incidente involucró a ciudadanos turcos y azerbaiyanos que agredieron a un residente local identificado como M.J.
Šćepanović señaló que la policía garantizará la seguridad en las protestas convocadas en respuesta al ataque y no permitirá que el conflicto se resuelva en las calles.
“Todas las manifestaciones deben ser controladas y los participantes actuar con calma,” afirmó Šćepanović en declaraciones para TVCG.
Contrario a rumores, el director aclaró que los sospechosos «no son migrantes» en situación irregular, sino que cuentan con permisos de residencia vigentes bajo diferentes modalidades. No obstante, advirtió que quienes violen la ley serán expulsados del país.
El ataque dejó heridas leves a la víctima, con cortes y una herida punzante, y la fiscalía calificó el delito luego de consultar con peritos. Identificaron a tres ciudadanos de Azerbaiyán y uno de Turquía entre los agresores en la zona de Zabjelo.
Šćepanović anunció una revisión exhaustiva del registro de extranjeros en Montenegro para expulsar a quienes no cumplan con la normativa, y recordó que las fuerzas del orden han procesado a cientos de ciudadanos turcos por actividades criminales en el pasado.
La nueva tensión social, que estalló tras el ataque en la capital montenegrina, subraya los desafíos en el control migratorio y la cooperación ciudadana en temas de seguridad pública.
































