La red pública de puntos de recarga para vehículos eléctricos (VE) en Escocia aumentó un 22,5% en el último año, según datos del Department for Transport. Ahora hay 7.355 cargadores en las carreteras escocesas, con 1.349 nuevos dispositivos instalados desde octubre pasado.
En todo el Reino Unido, la infraestructura para VE creció un 23%, sumando más de 15.000 cargadores para facilitar la transición eléctrica entre los conductores. Este avance responde tanto a fondos del gobierno escocés como a iniciativas del Ejecutivo británico.
El ministerio responsable de descarbonización, Keir Mather, destacó:
«Nunca ha habido un mejor momento para pasarse al eléctrico: los puntos de recarga suben un 23% en un año y ayudamos a los conductores con descuentos de hasta £3.750 en coches nuevos, todo parte de nuestro Plan for Change»
Además, el gobierno británico lanzó una ayuda de £650 millones para subvencionar coches eléctricos y redujo trámites para facilitar el acceso a la carga en viviendas sin garaje o para inquilinos.
El crecimiento en Escocia ocurre en un contexto de presión global por reducir emisiones y acelerar la movilidad eléctrica. Transport Scotland, organismo encargado en Escocia, ha sido contactado para aportar comentarios sobre estos datos.
En conjunto, estas cifras consolidan al Reino Unido como uno de los mercados más dinámicos en Europa para la expansión de puntos de recarga y uso de vehículos eléctricos.

































