Wrexham Council anunció una caída significativa en el número de reparaciones pendientes en viviendas sociales, tras la intensa labor de sus equipos durante los últimos meses.
En un informe presentado esta semana ante el comité de Vivienda y Medio Ambiente, el concejal David A. Bithell, responsable de Vivienda y Cambio Climático, destacó avances como la reducción del retraso en servicios de reparación, mejoras en alojamientos protegidos y la modernización de sistemas de calefacción conforme a los estándares de calidad galeses.
El jefe de Propiedad, Inversión y Mantenimiento, Lee Roberts, detalló que el retraso en el número de trabajos pendientes bajó de 3,247 en julio a 2,056 actualmente, una mejora superior al 30%. “Estamos empujando para reducir estas cifras al máximo”, afirmó.
La estrategia incluye además la instalación de sensores ambientales en algunas viviendas para monitorizar humedad y evitar problemas de humedad persistentes. Roberts explicó que esta tecnología permitirá intervenciones tempranas basadas en datos remotos, una innovación que por ahora sólo se aplica en casas que reciben aislamiento exterior con fondos del gobierno galés.
Los sensores captan niveles de humedad, sin afectar la privacidad al no detectar movimientos, buscando prevenir situaciones que afectan la salud y la integridad estructural de las viviendas.
El informe también resalta que se completaron más de 21,000 reparaciones el año pasado, además de instalar nuevos sistemas de calefacción, ventanas y puertas para alinearse con los Welsh Housing Quality Standards.
Los miembros del comité elogiaron a los equipos de trabajo. El concejal Trevor Bates calificó las mejoras como “una gran noticia” y agradeció el esfuerzo continuo. Por su parte, Paul Pemberton reconoció que “sin el equipo no estaríamos donde estamos hoy”.
Wrexham sigue enfrentando retos para cumplir con los nuevos estándares galeses de vivienda, pero sus responsables mantienen que la dedicación del personal es la clave para continuar avanzando.
